- La vigencia de la novela universal se incrementa sin límite desde que apareció hace más de 400 años en distintos idiomas hablados y con adelantos tecnológicos
La última versión del Quijote de la que se tiene noticia es
en guaraní. El jesuita español Bartomeu Melià decidió traducir el Quijote para desmenuzarlo mejor en sus
clases en la lengua cooficial de Paraguay y está a punto de ser publicada en
estos meses. Es la última versión a una lengua no mayoritaria de la que se tiene
noticia. La obra de Cervantes empezó a correr en otros idiomas desde muy
pronto, sin que el ansia por universalizar al personaje de la triste figura
haya dejado de latir con fuerza por todas las esquinas.
Hubo tres ediciones por parte de Juan de la Cuesta en los
primeros años de su aparición, así como copias que se imprimieron en Bruselas,
Lisboa y Milán, editadas en castellano, para dar fe del interés que rápidamente
levantó.
Primeras traducciones
El inglés (1612 y 1620) y el francés (1614 y 1618) fueron los primeros idiomas a los que
se tradujo el Quijote. Italia (1622), Alemania (1648) y Holanda (1657) llegaron después. La traducción al francés sirvió después como base a otras
lenguas. No se sacaba el texto directamente del español, pero multiplicó su
expansión durante los siglos XVII y XVIII, ante todo, en tierras eslavas.
Viaje a América
Una gran parte de la primera edición acabó en el nuevo
continente. De su expansión se dio noticia por vez primera en Perú. Argentina,
México, Venezuela... no tardaron en rendirle tributo.
Edición albanesa (2003) |
Decenas de lenguas
El Centro Virtual del Instituto Cervantes y la Biblioteca
Nacional han emprendido un enorme esfuerzo en los últimos años por recopilar y
llevar cuenta de diferentes versiones del Quijote en todo el mundo. Hasta
ahora, disponen de más de 200 en las que se puede contar la obra en diversas
lenguas: albanés, alemán, árabe, búlgaro, catalán, checo, chino, coreano,
croata, danés, esloveno, esperanto, estonio, euskera, finés, francés, gallego,
georgiano, griego, hebreo, hindi, holandés, húngaro, inglés, irlandés,
islandés, italiano, japonés, latín, lituano, maltés, noruego, persa, polaco,
portugués, rumano, ruso, serbio, sueco, tagalo, tailandés, turco, vietnamita y
yiddish.
El Quijote tecnológico
El lenguaje de la tecnología también ha sabido acercar el
libro a distintos soportes. Gabriel Medina Vílchez lo ha adaptado a T9, en
texto predictivo y con un total de 735 páginas codificadas. La Real Academia
Española lanzó por YouTube en 2010 una versión de lectura colectiva de la obra
con gran éxito: se convirtió en una sesión continua de tres días en la que
participaron 2.149 personas.
Extracto del artículo de Jesús Ruiz Mantilla. El texto completo en El País